El hoy dirigente estatal del PRI en Baja California logró el respaldo consejeros que por años habían estado ligados a Fernando Castro Trenti.

Por Alberto Sarmiento Reyes / Hiptex
La inusitada alianza al interior del Partido Revolucionario Institucional (PRI), encabezada por David Ruvalcaba Flores, apoyada por hankistas y algunos, hasta hace poco, incondicionales de Fernando Castro Trenti, logró “exorcizar” al tricolor del dominio que por cerca de dos décadas tenía “El Diablo”, como se le conoce al hoy embajador de México en Suiza.

Sin embargo, el “exorcismo” apenas fue lo suficientemente efectivo para expulsar “al Demonio” de la dirigencia estatal. La fórmula integrada por David Ruvalcaba Flores y Mayra Robles Aguirre apenas superó por 17 votos a la formada por Jesús García Castro y Cynthia Selene Ruiz Ramos, la primera obtuvo 261 sufragios contra 244 de su contrincante.

Pero el sufrido trabajo de “exorcismo” requirió a más de un padre, y no nos referimos al sacerdote que se encargó de la ceremonia, sino a quienes impulsaron esta extraña alianza.

El hoy dirigente estatal del PRI en Baja California logró el respaldo consejeros que por años habían estado ligados a Fernando Castro Trenti, como el ex candidato a la alcaldía de Tijuana, René Mendívil Acosta —quien por cierto no asistió a la asamblea—, la propia Mayra Robles y su hermano Javier, quienes en pleno auge del castrotrentismo fueron diputada federal y alcalde de Playas de Rosario, respectivamente. También estuvo Nereida Fuentes, ex legisladora local y actual alcaldesa de Tecate, con el respaldo del hoy diplomático.

Por el lado del grupo que encabeza Jorge Hank Rhon, fue Mario Madrigal Magaña el principal operador del hankismo para apoyar a Ruvalcaba. Personajes cercanos al ex alcalde Tijuana se volcaron en apoyo hacia el dirigente del Sitatyr en la entidad, como Enrique Pelayo Torres, Marco Novelo Osuna, Cesar Moreno, los diputados locales Bernardo Padilla Muñoz y Benjamín Gómez.

Pero otros priistas que no se les ubican en alguna de las dos corrientes que han vivido confrontadas al interior del PRI, también decidieron dar su apoyo a Ruvalcaba, como el ex alcalde Carlos Bustamante Anchondo y el diputado local Alejandro Arregui Ibarra.

Esta rara suma de priistas apenas logró superar por 17 votos al grupo identificado con Fernando Castro Trenti, que tuvo en la diputada federal Nancy Sánchez a su principal y más fiel operadora… y poco le faltó para evitar el “exorcismo”.

Aunque habrá de señalar que algunos hankistas apoyaron a Jesús García Castro. Si, fue una extraña elección.

Aunque el objetivo del “exorcismo” se encontraba a miles de kilómetros su presencia se dejó sentir con fuerza en en el recinto donde tuvo lugar la contienda anoche en la ciudad de Tecate.

Por ello, el “exorcismo” apenas le ha alcanzado a Ruvalcaba y su inusitada alianza para impedir que “el Demonio” siguiera formalmente en la dirigencia estatal del PRI… Hasta ahí sirvió el conjuro.

Los 244 votos obtenidos por el castrotrentismo significan que a pesar del “exorcismo”, “El Diablo” tiene aún muchos adeptos en el PRI de Baja California…

La pregunta que surge tras el triunfo de David Ruvalcaba es “¿qué sigue en el PRI?

Esa historia está aún por escribirse… pero desde ahora se vaticina que algunos “demonios” priistas se soltarán en los próximos día en busca de otros infiernos.