El actor estrena la tercera temporada de la serie de Apple TV+, la cual explora en temas como la humildad, la fidelidad y la paternidad, valores que el actor relaciona con su propia vida

CIUDAD DE MÉXICO.- Lo más importante en la vida profesional de una persona, según Eugenio Derbez, no es ganar dinero y subir a toda costa de posición, sino tener en claro tus valores y ser fiel a ellos. El actor cuenta que no aprendió esto de la noche a la mañana y además es algo que comparte con su personaje Máximo en la serie “Acapulco".

“Cuando terminé de grabar No se aceptan devoluciones, yo había estado haciendo mis programas en Televisa y a la vez estaba tratando de crecer en la industria de EU. Me iba, aunque nadie aquí lo sabía y nunca se me daba la oportunidad, entonces decidí enfocarme en mí y en mis cercanos y comenzaron a abrirse las puertas allá”, cuenta.

Es por eso que hoy que estrena la tercera temporada de Acapulco en Apple TV+, recuerda aquella experiencia, ya que al igual que él, su personaje tiene una revelación respecto a lo que significa lo material y su entorno.

“Él se da cuenta de que no vale la pena cruzar ciertas líneas con tal de ganar dinero o tener una mejor posición en el trabajo. Lo más importante es respetar tu manera de pensar, tu familia, no traicionar a tus amigos. Me sirve para recordar cuando a mí me sucedió y por supuesto para que la audiencia lo vea”, cuenta Derbez.

Ambientada en 1984, Acapulco sigue la historia de Máximo, quien cumple su sueño de trabajar en el mejor hotel de la ciudad, pero pronto se da cuenta de que no era tan fácil como pensaba.

En los nuevos episodios, la serie continúa la trama en la que una pequeña niña se presenta como la hija de Máximo, experiencia que el actor relaciona con su hija Aitana, quien tiene nueve años de edad.

“Esta temporada tiene mucho más corazón que las otras dos. Ser papá de Aitana me ha cambiado el panorama. Para mí era la vida diciéndome, ‘te doy una segunda oportunidad’. Y he tratado de aprovecharla. Todos los días me levanto pensando en hacer lo imposible para corregir todos los errores que cometí con mis otros tres hijos y es justo ese impulso el que tendrá a nivel emocional Máximo en esta temporada”, cuenta.

Después del paso del huracán Otis en la costa guerrerense en octubre pasado, Eugenio ve en esta temporada la oportunidad de volver a mostrar Acapulco al mundo como una potencia de turismo.

“Terminamos de filmar esta temporada y al poco tiempo sucedió lo del huracán y fue muy triste. Espero que la serie motive a que los turistas alrededor del mundo puedan ir a Acapulco. Sé que todavía no está al 100, pero ojalá ayude en algo para que se recupere todavía más rápido”, expresa Eugenio.

Al mismo tiempo, persigue incrementar la representatividad latina en producciones de EU: “Acapulco era como una necesidad el enseñar una parte de México diferente a la que se muestra todos los días en los noticieros, que no sólo somos eso malo”, reflexiona.