El presidente estadounidense Donald Trump elevó las tensiones diplomáticas con Colombia al lanzar duras acusaciones contra Gustavo Petro y advertir sobre la posible imposición de nuevos aranceles y la suspensión de ayuda económica
Las relaciones entre Estados Unidos y Colombia entraron en una nueva fase de fricción luego de que el presidente Donald Trump calificara a su homólogo colombiano, Gustavo Petro, como “líder del narcotráfico” durante un mitin en Texas.
El mandatario estadounidense afirmó que su gobierno “no seguirá financiando regímenes que promueven el tráfico de drogas” y amenazó con imponer aranceles a las exportaciones colombianas, además de suspender la ayuda bilateral en materia de seguridad y cooperación económica.
Petro respondió en redes sociales, calificando las declaraciones de “una agresión política sin fundamento” y recordando que Colombia “ha sido un aliado constante de Washington en la lucha contra el narcotráfico”.
Analistas internacionales advierten que la crisis diplomática podría tener repercusiones en la economía colombiana, dependiente de las exportaciones agrícolas e industriales hacia Estados Unidos. Además, podría poner en riesgo programas conjuntos de desarrollo rural y sustitución de cultivos ilícitos.
El Departamento de Estado aún no ha emitido una postura oficial, mientras fuentes en la Casa Blanca confirmaron que las declaraciones de Trump “no fueron coordinadas con el equipo diplomático”.