El primer ministro polaco Donald Tusk y el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy abren la puerta a una posible pausa prolongada en el enfrentamiento bélico con Rusia. La opción de un conflicto “congelado” cobra fuerza mientras se especula sobre un próximo encuentro entre Trump y Putin
Varsovia.– En una declaración conjunta emitida tras una reunión en Varsovia, el primer ministro de Polonia, Donald Tusk, y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, dejaron entrever la posibilidad de que el conflicto armado entre Ucrania y Rusia evolucione hacia un escenario de “congelamiento”, es decir, una suspensión prolongada de hostilidades sin una resolución definitiva.
“Hay un momento de oportunidad para evitar más sufrimiento sin renunciar a la soberanía de Ucrania”, afirmó Tusk, quien ha asumido un papel activo en la diplomacia regional. Por su parte, Zelenskyy evitó confirmar un alto al fuego, pero reconoció que “las opciones diplomáticas están en la mesa con más seriedad que en meses anteriores”.
El término “conflicto congelado” alude a una situación en la que las partes detienen las acciones militares de forma indefinida, pero sin firmar un tratado de paz. Ejemplos similares se han dado en territorios como Corea o Transnistria.
La posibilidad de un encuentro entre el expresidente de EE. UU., Donald Trump, y el mandatario ruso Vladimir Putin también ha sido tema de discusión. Se barajan como sedes del posible diálogo a Italia, Hungría y los Emiratos Árabes Unidos. Observadores internacionales aseguran que una mediación occidental podría marcar el rumbo de las próximas semanas.
Mientras tanto, en el terreno, los frentes permanecen tensos pero relativamente estables, sin avances significativos desde ambos bandos. El Ministerio de Defensa ucraniano reportó únicamente intercambios aislados en la región del Donbás en las últimas 24 horas.
Expertos advierten que un congelamiento sin garantías internacionales podría perpetuar la inestabilidad, pero también permitiría reconstruir parte de las zonas devastadas y atender la grave crisis humanitaria que afecta a millones de desplazados.